Se dice que en España los partidos políticos no se ponen de acuerdo para legislar en torno a la Enseñanza. ¿Quien lo dice? Los listos que blanquean la Logse y los tontos que no se atreven a escribir negro sobre blanco de manera clara y no oscura. Lo que no existe en España desde el 3 de ocubre de 1990 es otra ley educativa que sea diferente a la Logse. Solo surgen pequeñas modificaciones transitorias a la general y estable Ley socialista. Vigente durante 30 años.
Ya saben: el buen rollito, Rousseau y "el hombre es bueno por naturaleza", Hobbes-facha, profes-progres, padres-amigos, psicopedagogos metomentodo, opinar y no aprender, saber "caca", hacer "diver", el dato-wiki, estímulo-joven, memoria-vieja y, cómo no, El País en la Sala de Profesores (por si algún profesor no profesa aún el viejo pancismo-estatalismo o el nuevo gramscismo-superestructural).
Aparece en el horizonte un retorno a los orígenes. La Ley Celáa. Se trata, como ya se habrá adivinado, de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Educación de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Modificaciónde la Ley Orgánica de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Modificación... O sea, la Lomce. Es decir, la Logse.
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